El delincuente te tiene en la mira

Michele se sentía incómoda cuando estaba sola en público y se cuestionaba su habilidad para protegerse. Estaba cansada de ser el objeto de frases obscenas, avances no solicitados y acoso. Era constantemente abordada y molestada por mendigos y Casanovas borrachos en los bares. Decidió hacer algo sobre esto.

Hace cerca de un año, Michelle se apuntó a una clase de defensa personal en un centro comunitario local. Estaba decidida a terminar con que la gente que se aprovechase de ella. Quería aprender a defenderse y solucionar sus miedos y problemas de una vez por todas.
Michele disfrutó cono lo que estaba aprendiendo.  
Comenzó a leer acerca de la defensa personal y aprendió sobre la victimización y qué hacer sobre ello. Se interesó mas en su forma física y practicó lo que había aprendido en las clases de defensa personal. Incluso colgó un saco de boxeo pesado de las maderas del sótano y lo golpeó para "eliminar el estrés" de un duro día de trabajo en la oficina. Se sentía mas confiada y con mas control sobre su vida.

Una fría noche de noviembre, Michelle caminaba sola hacia su coche al finalizar el turno de tarde en su trabajo como recepcionista de hospital.

Generalmente, coordinaba su salida para ir con otros empleados, pero aquellas noche estaba demasiado cansada para esperar y solo quería llegar a casa. 

Lo que desconocía era que un predador estaba al acecho en las sobras a la caza de una víctima involuntaria. Vió a Michelle caminando en la lejanía. Ella también le vió. Se había entrenado para ser consciente de su entorno y notó como se acercaba hacia ella.

Una oleada de adrenalina la atravesó. Sus rodillas se debilitaron y su corazón se desbocó mientras luchaba con la urgencia de sufrir un ataque de pánico. Empezó a evaluar la situación y a formular un plan de acción. Miró directamente a la figura en la sombra haciendo obvio que era consciente de su presencia. Caminando a paso ligero y deliberadamente. continuó hacia su coche siendo muy consciente de que la estaban siguiendo.

¿Sabes qué pasó a continuación? ¡Nada! Por cualquier razón, el predador abortó su plan y renovó su búsqueda de otra persona; alguien que fuese mas fácil de cojer fuera de guardia y sin control. El motivo exacto por el que eligió no terminar lo que comenzó continúa siendo un misterio para Michele. 

Probablemente esperabas un clímax mas drámatico a la historia ¿no? Si esto fuese una película de Hollywood, Michelle hubiese sido atacada y, con un impresionante borrón de magia marcial, hubiese transformado a su asaltante en un montón arrebujado que se agarra los huevos en la acero. Lo siento, pero esta vez no. 

La teoría "preparación es igual a prevención"

Cuanto mas preparado estés para capear una crisis, menos probable será que tengas que haclo. Preparación es igual a prevención. La gente se acerca al entrenamiento en defensa persona por razones personales varias. A menudo es porque han sido burlados, acosados o víctimas en el pasado. 

A veces no lo han sido, pero les preocupa la posibilidad. La gente necesita sentirse a salvo. Es una necesidad fundamental de los humanos, también para la salud mental. Muchos psicólogos consideran la amenaza de la violencia universal como "fobia universal humana". 
Un entrenamiento adecuado de defensa personal proporciona habilidad, forma física y autoconfianza. 

Los estudiantes se sienten pronto más cómodos con la idea de dar la cara a los que les atormentan, ya sea el bravucón del patio del colegio o el del trabjo, un borracho en el bar o un mendigo pidiendo dinero. Ellos mismos son mas conscientes de su entorno y de sus opciones para hacer frente a situaciones volátiles. Se indignan de que alguien los puedas considerar presa fácil.

A menudo, como en el caso de Michele, los incidentes que previamente les flagelaban, simplemente dejan de suceder. ¿Porqué?

Criterio para la selección de víctimas
Los psicólogos saben desde hace años que los depredadores humanos eligen a sus presas basándose en las señales que emiten sus víctimas potenciales. En cuestión de segundos, el depredador siente quién es y quién no es un objetivo apropiado.

 Por cada víctima atacada, innumerables personas no lo son. ¿Cual es el criterio que utilizan los depredadores para seleccionar a sus víctimas? Te lo diré. 

¿Qué busca un criminal?
Igual que un animal salvaje, el predador humano quiere una conquista fácil. No quiere complicarse la vida innecesariamente, ni hacer su trabajo mas díficil o peligroso de lo que ya es. Buscará a quienes perciba como débiles, sumisos y que no sea probable que se defiendan. No quiere resistencia y mucho menos que lo hieran. Una señal de fuerza o desafío, ya sea flagrante o implícita, es suficiente a menudo para que abandone el proceso y busque una víctima mas "cooperativa".

Si pueden evitarlo, los bravucones no pelean con gente que les pueda dar de tortas. No seleccionarán a gente que se les enfrenté y les eché en cara su comportamiento. Los violdores, ladrones, acosadores y matones buscan a alguien que puedan dominar y controlar.
 
Nota: Algunos programas de defensa personal defienden adoptar SIEMPRE una respuesta desafiante en un enfrentamiento. No aceptes soluciones simplistas a problemas complejos. El mundo no funciona de esa forma. 

Lo que puede disuadir a un asaltante puede enfurecer a otro. Una respuesta desafiante puede crear una situación en la que el asaltante se sienta obligado a llevar a cabo su amenaza o "perder la cara". La gente luchará para salvar la cara ¡incluso si piensan que van a perder!

Como aprenderás en artículos subsecuentes, necesitamos desarrollar una serie de habilidades y técnicas y aplicar la mas apropiada para las circunstancias dadas.

El estudio Grayson/Stein
En 1984 dos investigadores, Betty Grayson y Morris I. Stein, llevaron a cabo un estudio para determinar los criterios de selección que aplicaban los depredadores cuando seleccionaban a sus víctimas. Grabaron a varios peatones en una acera concurrida de Nueva York sin que lo supieran. 

Después mostraron la cinta a convictos encarcelados por crímenes violentos (violación, asesinato, robo, etc.). Les instruyeron para que identificasen a gente en la cinta que fuese blancos fáciles o víctimas apetecibles. Los resultados fueron interesantes. 

En menos de siete segundos, los participantes tomaban su decisión. Lo que sorprendió a los investigadores fue la consistencia de la gente que era seleccionada como víctima. El criterio no era aparente de primeras. Algunas mujeres pequeñas y delgadas no fueron elegidas. Algunos hombretones fueron seleccionados. La selección no dependía de raza, edad, tamaño o género. 

Ni siquiera los convictos sabían exactamente porqué habían seleccionado de la forma que lo hicieron. Algunas personas simplemente parecían blancos fáciles. Parece ser que la mayoría del proceso de selección depredador/presa es inconsciente desde las perspectiva de ambos, el depredador y la víctima potencial. 

Análisis de vídeo
Perdidos todavía en cuanto a los criterios específicos de selección, los investigadores analizaron en profundidad la forma de moverse y el lenguaje corporal de la gente en la cinta de vídeo. Aquí hay un resumen de los resultados: 

1.Pasos:
Las personas seleccionadas como víctimas tenían un paso exagerado: anormalmente largo o anormalmente corto. Arrastraban, deslizaban o levantaban los pies de forma poco natural al caminar. Las no-víctimas, por otra parte, tendían a tener una paso suave y natural. Caminaban apoyando primero el talón y luego los dedos. 


2.Cadencia:
Las víctimas tendían a caminar con una cadencia diferente de los que no lo eran. Normalmente, caminaban mas despacio que el flujo de peatones. Sus movimientos carecían de un sentido de deliberación o propósito. Sin embargo, un paso demasiado rápido puede proyectar nerviosismo o miedo. 



3.Fluidez:
Los investigadore notaron torpeza en el movimiento corporal de una víctima. Caminar a saltos, subiendo y bajando el centro de gravedad o vacilando de lado a lado al moverse se hizo aparente en las víctimas analizadas. Esto contrastaba con los movimientos mas suaves y coordinados de las no-víctimas. 


4.Entereza:
Las víctimas carecían de "entereza" en su movimiento corporal. Columpiaban los bazos como si fuesen independientes y estuviesen separados del resto del cuerpo. Las no-víctimas movían el cuerpo desde su "centro" como un todo coordinado, comportando fuerza, equilibrio y confianza. 


5.Postura y vista:
Una postura encorvada es indicativa de debilidad y sumisión. Una vista baja implica preocupación y falta de atención al entorno. También puede ser percibido como sumiso alguien reluctante a establecer contacto visual. Estos rasgos implican un blanco ideal para un depredador.


En su libro "El peligro de los extraños", el autor James D. Brewer cita a uno de los investigadores que llevaron a cabo el estudio anterior: "Grayson está convencido de que cuando la gente entiende como moverse con confianza, pueden "ser enseñados a caminar de esa formas y reducir substancialmente el riesgo de asalto"".

¿Cómo se aplica esto a la teoría de prevención?
Si leiste entre las líneas de esta investigación, la teoría de "preparación es igual a prevención" cobra sentido. Los rasgos descritos anteriormente indican grados variados de equilibrio, coordinación y atención. Implican la vigilancia y el potencial de defenderse percibidos por una persona.

El estudio y el entrenamiento de la defensa personal desarrollan las cualidades de movimiento que desalentan la selección de víctimas y proyectan una conducta "no me busques las cosquillas". Esto explica porqué, cuando una persona que ha sido previamente ha sido acosada o victimizada comienza a estudiar defensa personal, los incidentes que originalmente la flagelaban, cesan. 

A diferencia del profesor Grayson, dudo que la solución para reducir el potencial de convertirse en victima sea tan simple como tomar "lecciones de andar". También, y al contrario de lo que sugieren muchos instructores de defensa personal, tampoco puedes "pretender" o "simular" confianza y esperar que no te toque ser víctima en el reparto de los criminales. 

Dudo que un intento deliberado de modificar la forma en que caminas, te mueves y oscilas los brazos (incluso si puedieras hacerlo) trajese los resultados deseados. Imagina una persona torpe y fuera de forma tratando conscientemente de corregir movimientos corporales 
incorrectos asociados a ser torpe y estar fuera de forma.

 No puedes pretender coordinación. No puedes imitar el equilibrio. No puedes falsificar fuerza o resistencia. Sin embargo, cada una de estas cualidades puede desarrollarse a través del estudio de la defensa personal y puede reducir dramáticamente el riesgo de asalto. 

¿Y qué? ¿Como puedo utilizar esta información?
Una gran parte del proceso de selección predaor/presa es inconsciente. Creo que es una cualidad evolucionaria de la mente subconsciente que hemos heredado de nuestros ancestros. Habría sido necesario para la supervivencia seleccionar una presa que no se volviese ¡y arrancase tu cabeza de un mordisco! Los que carecían de esta cualidad habrían sido sin dudar eliminados del acervo genético. 

No es probable que puedas controlar consciente y consistentemente las señales verbales que proyectas. Sin embargo, no quiere decir que no puedas modificar estas señales de forma positiva y poderosa. Aquí está lo que puedes hacer: 

·Desarrolla tus habilidades atentivas
El depredador busca una víctima inconsciente, preocupada y fácil de emboscar. Al prestar mas atención a tu alrededor, no solo incrementas la probabilidad de detectar un depredador potencial, sino que proyectas una imagen de vigilancia. Lo que por si mismo puede finalizar el proceso de selección.* 

·Ponte en forma
Tu nivel de forma física repercute en tu habilidad para defenderte. Primero, si eres atacado, la habilidad de escapar o defenderte del atacante se ve dramáticamente impactada por tu condición física. Segundo, un cuerpo fuerte y con buen tono manifestará la cualidad del movimiento en una no-víctima. 

Finalmente, la forma repercute en la personalidad de manera positiva. La autoestima, confianza y resistencia emocional incrementadas que resultan de estar en buena forma física son cualidades de no-víctimas que los depredadores quieren evitar. 

·Apúntate a un curso de defensa personal
No hay artes marciales superiores, solo mejores artistas marciales. No te quedes atascado por querer escoger "el mejor" estilo o programa. Soy un gran defensor del entrenamiento de defensa personal y artes marciales (tanto en un gimnasio como por tu cuenta) para reducir el riesgo de asalto. 

Por las razones que ya he mencionado, el entrenamiento de defensa personal reduce la probabilidad de tener que defenderte. Aprende todo lo que puedas sobre situaciones de enfrentamiento y desarrolla herramientas para manejarlas. Incorpora prácticas regulares tales como ejercicios con guantes de boxeo, por ejemplo*, o aprende como pegar y patear un saco pesado de boxeo. Diviérte al hacerlo. 

·El conocimiento es poder:
El conocimiento reduce el miedo y da confianza. La confianza es una cualidad de no víctimas. Lee libros sobre defensa personal. Haz lo que puedas para clarificar tus "mapas mentales" sobre como suceden los enfrentamientos, como evitarlos, y como responderlos si no puedes. 

La actitud mas peligrosa en un enfrentamiento es el "síndrome nunca me pasará". El hecho de que estés leyendo este artículo ya te pone por delante en el "juego de no-víctima".


·Trabaja desde dentro hacia afuera
He centrado el contenido de este artículo en los aspectos mas "directos" de reducir el potencial victimista. Hay otros muchos aspectos asociados a la personalidad y psicología que repercuten en el potencial victimista y en la habilidad para afrontar efectivamente una confrontación.

 Discutiré estás cualidades, y como desarrollarlas, en futuros artículos. Mientras tanto, haz lo que puedas para aumentar tu autoestima, dureza mental, motivación, etc. 

Conclusión
El potencial de convertirse en víctima está influenciado, en una gran parte, en las señales inconscientes que se proyectan al asaltante. Los predarores, ya sea deliberada o intuitivamente, forman una opinión sobre uno y lo fácil que sería dominarle y controlarle. Buscan un blanco débil, sumiso e inconscinte que no vaya, o no pueda, defenderse.

Se puede controlar las señales no verbales que se proyectan invirtiendo tiempo en el estudio y la práctica de la defensa personal. El lenguaje corporal proyectado cuidará de sí mismo. No lo puedes disimular. Debes ganártelo. No es tan difícil como parece. Si realmente quieres prevenir o reducir dramáticamente la probabilidad de convertirte en víctima, prepárate. ¡Preparación es igual a prevención!

Fuente: Randy Lahaie